martes, 25 de septiembre de 2007

El País y los amigos de Zapatero

Cuando se ve amenazado un monopolio pasan estas cosas:
Por amigos de Zapatero pasan varios de los más destacados accionistas, directivos y promotores de la cadena de televisión La Sexta, de la que es accionista la productora Mediapro, cuyo presidente, Jaume Roures, promueve el periódico Público, de próxima aparición. Felipe González también lanzó un mensaje sobre este asunto en el homenaje a Polanco cuando recordó cómo se deshizo de los 'periódicos del Gobierno'. 'No quería tenerlos. Me parecía una contradicción en sus términos', señaló.
(...)
Roures es también el principal promotor del periódico Público. El proyecto de dicho diario le fue presentado a Zapatero hace ya bastantes meses, como ha admitido el propio presidente en círculos íntimos. Zapatero, aseguran fuentes próximas a él, ve 'con simpatía' la llegada de un periódico que esté 'más a la izquierda que EL PAÍS'. 'Si Zapatero quiere, el periódico saldrá; y, si no quiere, no saldrá', aseguraban a comienzos de año algunas fuentes próximas a Moncloa. El jefe del Gobierno niega tener semejante influencia.
Berlin Smith enlazaba hace un par de días al artículo en cuestión, que no tiene desperdicio. Parece que los chicos de El País se están poniendo nerviosos, que los beneficios peligran y que eso está repercutiendo en su línea editorial e informativa. Ya hace unos días que los titulares y editoriales del periódico de los intelectuales sorprenden por su tono de inusitada dureza en lo que respecta a Zapatero y a sus ministros --y ministras, seamos paritarios--.
Qué ironía que El País hable de los "periódicos del gobierno" como si el rollo no fuera con ellos. La estrategia parece consistir en acusar de antemano a Público de hacer exactamente aquello que El País lleva haciendo de manera sistemática en los últimos tiempos (creo que antes era más serio, o eso quisiera pensar). No me cabe la menor duda, a la vista de la publicidad de Público que he visto hasta el momento, de que efectivamente las cualidades que El País le está atribuyendo serán las que finalmente muestre. Lo que choca es, por una parte, que un medio de referencia se permita hacer semejantes juicios antes aún de que la publicación vea la luz --sí, todos lo pensamos, pero una cosa es una tertulia de sobremesa en la cafetería de la esquina y otra el periódico de mayor tirada de España: cuestión de deontología--. Por otra, llama la atención, aunque quizá a estas alturas no debiera, el grado de hipocresía manifestado. Debe ser algo así como esa "hipocresía de la oposición" que la Cadena Ser lleva una legislatura entera afanada en sacar a la luz.
Cosas veredes, Sancho.

15 comentarios:

  1. A veces pienso que no estoy en España (y, por lo tanto, en el mundo de las primeras potencias, jejeje), porque de esto prácticamente ni me he enterado.

    Así que espero que (me) sigas informando, eh.

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  2. En casos como el de España, ignorance is bliss :-P

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  3. Hace unos días un columnista de aquí, de Asturias, "cantaba" las excelencias de la división "mediática" de los "progres", no vayamos a comenter el error de llamarlos "de izquierdas". Yo estaba de acuerdo. Dejemos que se dividan, ya se sabe, divide y...

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  4. La pérdida de lectores de El País y su cambio de postura es semejante a la ocurrida en Antena3 cuando se produjo el cambio de gobierno y cientos de miles de personas buscaban un nuevo Urdazi. No me extraña nada... money makes the world go around

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  5. Qué anglófono (xD toma palabro) todo.

    Es curioso lo de Público... ¿Crees que podría haber un periódico así, pero gratuito? ¿Crees que podría serlo, una vez se haya asentado? Es una posibilidad que manejan a veces las empresas de comunicación. 50 céntimos no es mucho. Yo pienso leerlo alguna vez, aunque sólo sea por saber cómo no tengo o no quiero ser cuando sea mayor (y sobre todo, siendo joven :D).
    Me estoy aficionado a varios programas de la Ser AHORA, sí. Y no sólo por ganas de enterarme de qué pasa en el mundo (sabes que soy más bien de leer cosas de cine y comunicación) sino por saber cómo lo cuentan, ya que al fin y al cabo es a lo que quiero dedicarme.
    Hoy pensé en cómo sería un periódico que montáramos nosotros. Le daré rienda suelta a esas ideas, seguiré madurándolas un poco... Pero insisto en que quiero ver cómo es Público.

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  6. (Soy una pesada)

    Mañana sale, con una tirada de 250.000 ejemplares y un diseño "fácil de leer" y "a todo color", según cuentan en Terra.es (primera página a la que me ha mandao Google).
    Pues ya te contaré.

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  7. Yo también tengo interés en leerlo, ¿por qué no? El interés es la madre de la ciencia, ¿o era la curiosidad?

    Por cierto, ayer me fui a la página de Escolar y vi que se va a dedicar a "Público" (demócrata-radical, más radical de lo habitual, o algo así dijo). Interesante, interesante (y me llamó la atención que el peródico no vaya a tener su línea editorial).

    ¿Tú crees que Público va a representar realmente una visión "más a la izquierda" del PSOE que la que ofrece El País? De hecho, ¿qué crees que significa eso? ¿Fratricidio?

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  8. En respuesta un poco a todos:

    Habrá que esperar a verlo para opinar (y sí, yo también tengo interés, está claro). Además, convendrá esperar a que lleve un tiempo, porque un único número dudo que sea representativo.

    Aun así, cabe apuntar algunas cosas. Por una parte, eso de "más a la izquierda" se me antoja un poco absurdo. Ni más ni menos ni mucho ni poco, ni a la izquierda ni a la derecha: lo que pediríamos muchos (aunque obviamente no todos) sería un periódico en el que ese tipo de postura no resulte evidente, donde la adscripción política no determine una tendencia informativa. Está claro que esto es un ideal y que la objetividad no existe, pero creo que es a lo que hay que aspirar aunque sea como meta inalcanzable, y por tanto no me parece que partir de ese planteamiento de "más a la izquierda que" sea algo positivo. Uno no puede ser totalmente objetivo y neutral, pero la honradez personal y profesional debe ir por delante de cualquier adscripción política, y ya desde un principio no queda nada claro que vaya a ser así.

    Por otra parte, he visto y oído publicidad del nuevo diario y resulta bastante desalentadora la forma en que intentan apelar a un determinado grupo de edad (como si la edad impusiese unas afinidades más importantes que cualquier otra característica personal o social, cuando quizá sea más bien al contrario). Y desde luego, el llamamiento se plantea (vean ustedes el anuncio televisivo) desde una óptica "progre" y yo diría que bastante demagógica, lo cual de entrada ya me echa para atrás. En ese sentido, me da la impresión de que más que estar "más a la izquierda que El País" (¿El País lo está?) significará más bien ser "más progre [aún] que El País" o, lo que es lo mismo, más amigos del PSOE y concretamente del PSOE de Zapatero. Sobre todo ahora que El País parece estar variando su línea editorial. Es obvio que este cambio de rumbo de El País dice muy poco de su código ético y mucho de sus intereses comerciales, pero al fin y al cabo es un viraje forzado que tal vez sirva para moderar determinadas tendencias en su seno que a algunos nos tenían ya bastante hartos. Habrá que ver si el giro de El País se consolida y si éste, a su vez, puede generar nuevos virajes en otros medios.

    Por último, respecto a la ausencia de editorial, a mí también me llamó la atención, pero en buena medida me parece una trampa fácil, porque no tener editorial (1) no exime de tener una línea de opinión, y en este sentido habrá que estar atentos a columnas y artículos y al grado de homogeneidad o pluralidad que manifieste el conjunto; además, (2) aunque el editorial sea en gran medida un sinsentido --dado que se supone que representa la opinión "del periódico" y, efectivamente, una entidad no puede tener opinión--, también es cierto que para el lector se trata al menos de una declaración de intenciones que en cierto modo advierte del sesgo que pueden acabar teniendo las noticias. En este caso, el lector estaría desprovisto de esta advertencia. Siempre me ha parecido que lo más peligroso o tendencioso de un medio de información no son sus apartados de opinión, sino precisamente los "informativos" en los que información y opinión se solapan y la línea que los separa --o que debería separarlos-- pierde toda nitidez.

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  9. Me da la impresión de que lo que intentan esos dos periódicos, El País y Público, (como muchos otros) es contar a un sector de gente lo que ese sector desea que le cuenten.

    En España hay un grupo social que ha adoptado una estética izquierdista (lo cual no implica que ese izquierdismo vaya más allá de esa estética) y que espera que cuando le hablen de Aznar o Bush sea para zumbarles, que cuando le hablen de Iraq le digan que los americanos torturan a diestro y siniestro.

    Hay un antiamericanismo de garrafón que consiste en volcar en los EE UU el antimodelo de esa estética de izquierda. Pues bien: ahí tenemos a varios medios pugnando por ese "target" y haciendo todos los esfuerzos para que el progresista medio vea Tele 5, La Cuatro o la Sexta, o en versión papel, los periódicos de Vocento, El País o Público. Y eso, señoras y señores, país y público en general, es PUBLICIDAD. Montones de anuncios en los dominicales de perfumes caros y casas sofisticadas, coches y cacharrería electrónica.

    Me parece que alguno sí cree en lo que cuenta, pero no necesariamente todos, ni mucho menos los dueños del negocio.

    Un saludo.

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  10. De acuerdo con sursum corda en lo de la publicidad... en el Público abunda.
    Sobre lo del radicalismo de Escolar... tengo ya el periódico en mis manos, y hay un artículo de un tal Javier Ortiz que se llama "Perdonen: aquí un radical" sobre el significado de la palabra. Y también una especie de editorial - reflexión sobre la línea informativa (que no ideológica) del periódico firmada por Rafael Reig, ahora redactor jefe de la sección de Participación, cuya frase inicial y final es "Ojalá en Público nos equivoquemos a menudo", porque (cito textualmente) "El que piensa sobre seguro, sin correr ningún riesgo, es verdad que nunca dice nada incorrecto, pero en realidad tampoco dice nada de interés. [...] No queremos administrar monólogos incontestables, sino provocar un diálogo, buscar un interlocutor con el que mantener una discusión. Para conseguir eso, hay que arriesgarse incluso a mear fuera del tiesto."
    Esperemos que no se refiera al mismo diálogo que Zapatero :P Por lo demás, aquí sigo leyendo el periódico.

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  11. Javier Ortiz antes escribía en El Mundo y "Diario de un resentido social": algo intermedio entre izquierda machacaAznar y federalismo proPNV.

    Un tipo curioso que en Público se va a encontrar más en su salsa.

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  12. Pero bueno EL PAIS y Prisa siempre han sido asi... E suna pena , es el mejor periodico que hay en España y es bastante malo....


    Recuerdo que José María García contó una vez que Polanco estuvo reunido toda la noche del 23F con algunos militares y que ya había asegurar continuar su "monopolio" si triunfaba el golpe...

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  13. En realidad, lo peor de todo es que parece que la guerra del fútbol se acaba y volveremos al pronto pago para ver algo de césped.

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  14. Totalmente de acuerdo contigo, Sursum corda, en que ambos lo que hacen es servir a la gente --a determinada gente-- lo que quiere. El caso es que El País tenía hasta ahora el "monopolio" en el caso de la progresía, y ahora el mercado ese se les divide. Veremos a ver cómo reacciona (porque lo de estos días puede durar o no, habrá que estar atentos).
    Javier Ortiz, efectivamente, encaja bien en esa definición... Escribe bien (la verdad), pero no me parece precisamente una referencia. En cualquier caso, ciertamente parece ser el tipo de 'intelectual' que busca Público, en consonancia con la forma en que se han venido promocionando.
    booMer, eso suena muy bonito, pero habrá que ver en qué quedan todas esas palabras progreguays. Y espero que no se tomen demasiado en serio eso de ir por la vida meando fuera del tiesto...
    Jose, ciertamente esto no debería sorprendernos, pero no deja de ser interesante la constatación del fenómeno. En cuanto a Polanco y el 23F, a saber; ni me lo creo ni me lo dejo de creer, la verdad.
    Ottinger, has dado en el clavo: ¡la tragedia real es la del fútbol! :-P Hay que ver, este país está olvidando el interés general. A dónde vamos a ir a parar...

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  15. Tienen seis páginas de ciencia! Y unas pocas tb de cultura! En fin, cómo se nota que todo esto lo financia Mediapro, porque si no no podrían permitirse lanzar a la calle 80 páginas por sólo 50 céntimos.
    Y volvemos a lo de siempre: Mediapro tb es dueño de la Sexta... no, si al final tos los platos rotos los paga el fúrbo, y los furbolistas!
    Qué poca vergüenza!

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